El autotransporte en México mantiene una dualidad que se ha vuelto estructural: una base empresarial ampliamente atomizada, pero con el parque vehicular concentrado en pocos jugadores.
Con base en los registros de la Dirección General de Autotransporte Federal (DGAF), el sector mantiene una composición estructural prácticamente inamovible. De las empresas que integran el autotransporte de carga en el país, 80% son micro, con flotas de una a cinco unidades, mientras que las grandes compañías, con más de 100 vehículos, representan apenas el 0.68% del total.
Sin embargo, el tamaño de la flota sigue marcando las diferencias. Las grandes empresas concentran 31% del parque vehicular nacional, las pequeñas (seis a 30 unidades) reúnen 29%, las medianas (31 a 100) aportan 17%, y las micro, pese a su peso numérico, solo alcanzan 22 por ciento.
Al revisar las cifras de la DGAF, se observa que esta estructura ha permanecido prácticamente sin cambios entre enero de 2024 y julio de 2025. El número total de unidades pasó de 1.33 a 1.48 millones, pero la distribución por tamaño de empresa apenas se modificó unas décimas.
Las cifras también revelan que la renovación del parque se concentra en las flotas de mayor tamaño, mientras que la base del sector —formada por miles de micro y pequeñas empresas— opera con vehículos más antiguos y márgenes de operación limitados.
La edad promedio del parque se mantiene en 18.9 años (al cierre de julio de 2025), con ligeras variaciones mensuales, lo que confirma un ritmo lento de modernización.